1. Clave para el éxito como emprendedor
¿Te has preguntado si tienes el tipo de personalidad necesario para ser tu propio jefe?
Muchos rasgos específicos de la personalidad como la adaptabilidad y el optimismo ayudan a fomentar el éxito empresarial.Los rasgos de la personalidad emprendedora ayudan a los empresarios a superar los retos de crear y dirigir una empresa. Aunque algunas personas nacen con rasgos de personalidad emprendedora, es importante destacar que muchas de estas habilidades y actitudes se pueden desarrollar y perfeccionar con el tiempo.
Este artículo va dirigido a empresarios y personas que estén pensando en crear una empresa. Exploraremos los rasgos de la personalidad empresarial que fomentan el éxito y compartiremos consejos sobre cómo cultivar las habilidades y actitudes necesarias para ser tu propio jefe.
Los emprendedores de éxito parecen compartir rasgos de personalidad específicos que les ayudan a superar los retos de poner en marcha un negocio y a perseverar ante los obstáculos que invariablemente surgen al dirigir una empresa. Crear una empresa no es para todo el mundo, pero los empresarios de éxito disfrutan de los riesgos y las recompensas de ser propietarios de un negocio.
Para comprender mejor estos rasgos de personalidad clave y cómo influyen en el éxito empresarial, es esencial analizarlos en detalle. A continuación, profundizaremos en algunas de las cualidades más importantes que definen a un empresario de éxito:
2. Rasgos de la personalidad empresarial
Hemos preguntado a varios líderes empresariales por los rasgos de personalidad esenciales para emprender. Compartieron una serie de atributos que se combinan para fomentar el éxito empresarial. Puede que ya posea estos rasgos de personalidad, pero si no es así, es posible cultivarlos.
2.1. Los emprendedores tienen un alto nivel de energía
Como consultora de marketing de marca y relaciones públicas, Lisa Murray ha trabajado con muchos emprendedores en serie. Una cualidad que todos tienen en común, dice, es su capacidad para estar siempre en movimiento.
"Los emprendedores natos no saben desconectar", afirma Murray, directora y cofundadora de Trevi Communications. "Emiten un zumbido constante de ideas, planes, estrategias y energía de alto octanaje".
No estamos sugiriendo que nunca te desconectes; eso no sería saludable para la mayoría de nosotros. Pero si tus ideas empresariales te entusiasman, naturalmente les aportarás más energía.
Si encontrar energía física es un reto, hay formas saludables de mejorarla, más allá de la cafeína u otras sustancias. El aire fresco y mover el cuerpo son dos opciones, y ni siquiera estamos hablando de emprender una compleja rutina de ejercicios. Cualquier forma de levantarse y moverse durante unos minutos puede mejorar la energía. Un circuito rápido o dos por la oficina, bailar un par de canciones enérgicas e incluso realizar tareas domésticas mundanas pueden ayudar si se acelera un poco conscientemente. Cualquier movimiento que aumente el ritmo cardíaco durante unos minutos puede tener efectos duraderos.
Lo que consumas también importa. Para un subidón rápido de energía, la fruta o el zumo son estupendos; para una energía más duradera, las proteínas. El problema de tomar una chocolatina o algo con cafeína es el inevitable bajón posterior, que puede anular lo que querías conseguir.
2.2. Los emprendedores son persuasivos
Uno de los signos clave de un emprendedor nato es su capacidad para vender una idea y persuadir a los demás para que se adhieran a su causa, afirma Nancy Eberhardt, autora y coach de CEOs.
"Tanto si se trata de un negocio de jardinería a los 12 años como de vender revistas puerta a puerta para financiar un viaje escolar, son persistentes a la hora de hablar de ello y de explicar por qué es necesario", afirma Eberhardt. "Son casi intrépidos a la hora de acercarse y presentar su idea, servicio o producto".
Esto no significa que te abalances sobre todos los que conozcas; seguro que te sale el tiro por la culata. Pero es aconsejable buscar técnicas persuasivas, y hay muchas. Las personas persuasivas aprenden a medir el tiempo de sus peticiones y a hablar el idioma de la otra persona. Presentan sus ideas como beneficiosas para todos y pueden mostrar formas concretas de respaldarlas. Y también saben cuándo es el momento de callarse y seguir adelante.
2.3. Los emprendedores son ingeniosos
Robin Samora, consultora de marketing y relaciones públicas que trabaja casi exclusivamente con empresarios, afirma que éstos suelen tener una forma única de solucionar los problemas que puedan surgir. "Se les ocurren formas novedosas de resolver problemas que otros ni siquiera pueden imaginar", afirma Samora. "Las ideas fluyen y les salen de forma natural".
Cuando nos enfrentamos a un reto, tendemos a buscar soluciones convencionales: las que han funcionado en el pasado y otras soluciones conocidas. Para ir más allá de lo convencional, organiza una sesión de brainstorming sin tapujos. Puedes hacerlo con otras personas o por tu cuenta, anotando rápidamente cualquier idea que te venga a la cabeza y negándote a editarla hasta agotar todas las ideas, por disparatadas que parezcan.
Mantén una mentalidad abierta contigo mismo y con los demás (si los hay), y no rechaces ni una sola idea. Una vez que tengas las ideas por escrito, guárdalas. Cuando vuelvas a ellas dentro de una hora, un día o una semana, es probable que descubras algo útil.
2.4. Los emprendedores son optimistas
Desarrollar una actitud positiva puede ayudar en cualquier carrera, pero la positividad y el optimismo son cruciales para los emprendedores que quieren hacer crecer sus negocios y triunfar. Incluso en las peores situaciones, los empresarios de éxito siempre ven la oportunidad de sacar algo nuevo, afirma Lili Balfour, fundadora de la empresa de banca de inversión Atelier Advisors.
"Cuando su mundo se desmorona, mantienen la calma, sabiendo que hay una lección que aprender", afirma Balfour. "Están agradecidos por lo que ha funcionado (...) y aprenden de lo que no".
Apagar todo y alejarse es fácil y tentador. Incluso puede ser necesario. Pero no debe impedir que se hagan realidad los sueños y las ideas.
Los optimistas utilizan un lenguaje diferente: En lugar de "He fracasado", dicen "Eso ha fracasado". En lugar de "Obviamente, no sirvo para eso", dicen "¿Cómo podría haberlo hecho mejor?". Y no es sólo "¿En qué me equivoqué?", sino también "¿Qué hice bien?".
Los optimistas ven oportunidades donde otros sólo ven fracasos.
2.5. Los emprendedores son oportunistas
La palabra "oportunista" tiene mala fama, pero nos referimos a personas que están constantemente a la búsqueda de nuevas oportunidades, una cualidad necesaria para los emprendedores que buscan formas de convertir ideas en productos.
El Dr. Tomas Chamorro-Premuzic, autor y profesor de psicología empresarial, cree que los emprendedores tienen una mentalidad de búsqueda de oportunidades y siempre están preparados para ver una ventaja situacional.
"Ven oportunidades donde otros no las ven", afirma Chamorro-Premuzic, y añade que están dispuestos a aprovecharlas incluso cuando otros dudan en asumir el riesgo.
Esto no quiere decir que lo hipoteques todo al máximo; sólo significa que mantengas los ojos abiertos en busca de rutas para hacer lo siguiente. Estas oportunidades pueden presentarse dentro de tu organización, así que escucha atentamente a quienes aporten nuevas ideas.
Pueden venir de fuera, de un consejo de alguien de tu red, de un cambio de precio en un producto o de una revista profesional; en realidad, de cualquier parte. Así que asegúrese de seguir buscando.
2.6. Los emprendedores son conscientes de sí mismos
Nadia Digilov, que dejó su carrera en Wall Street para convertirse en empresaria de bodas y escritora de éxito, afirma que los emprendedores están dispuestos a reconocer sus errores y aprender de ellos.
"Los emprendedores naturales analizan su comportamiento y no temen admitir que han cometido un error", afirma Digilov. "Intentan corregir los comportamientos negativos con más facilidad que [los no emprendedores]".
Puede que le preocupe que admitir un error le haga parecer débil. Esto no podría ser más erróneo. Aceptar y admitir que se ha equivocado le hace parecer más humano, digno de confianza y accesible a los miembros de su organización y a las personas con las que hace negocios.
La peor parte de negarse a admitir que cometiste un error es que te arriesgas a continuar con el mismo error, lo que también pone en riesgo tu negocio a largo plazo.
2.7. Los empresarios son creativos
Poner en marcha un negocio requiere un pensamiento creativo constante, por lo que la mente de un emprendedor siempre está trabajando, afirma Richard Stiennon, analista jefe de investigación y fundador de la empresa de análisis IT-Harvest.
"No pueden desconectar el flujo de ideas", afirma Stiennon. "Cada problema es una oportunidad para crear una empresa que lo resuelva".
A veces tenemos que trasladarnos a otro entorno para poner en marcha el proceso creativo. Esto puede significar un cambio físico o sacar tu mente del mundo en el que generalmente habitas. Algunas estrategias para cambiar el entorno de tu mente incluyen:
- Leer una revista profesional de un sector muy distinto al tuyo.
- Ponerse en el lugar de otra persona y pensar en cómo abordaría un reto al que usted se enfrenta.
- Practicar un hobby que nunca te habías planteado.
A veces surge una solución creativa cuando tu mente parece estar ocupada con otras tareas.
2.8. Los empresarios son decididos
Dirigir una empresa exige actuar incluso cuando no hay una mejor opción obvia. Elene Cafasso, presidenta y fundadora de la empresa de coaching ejecutivo Enerpace Inc, afirma que los emprendedores pueden ser decisivos frente a muchas exigencias contrapuestas.
"Si usted es una persona que se paraliza cuando hay demasiadas piezas en movimiento y demasiados imprevistos, entonces tener su propia empresa no es adecuado para usted", dijo Cafasso.
Los empresarios, por el contrario, pueden tomar decisiones y actuar con confianza.
Seamos o no conscientes de ello, todos reconocemos que incluso las pequeñas decisiones conllevan riesgos y consecuencias, buenas, malas o neutras. La pregunta es: ¿tiene usted la confianza empresarial necesaria para tomar una decisión cuando el calor aprieta? Importa porque tener un negocio puede generar mucho calor.
2.9. Los empresarios son resistentes
Hope Katz Gibbs, fundadora y presidenta de Inkandescent Public Relations, afirma que, como empresaria, cree que quienes nacen con las características necesarias para dirigir su propio negocio están dispuestos a levantarse después de haber sido derribados. Pueden resistir contratiempos y liderar a su equipo en una mala racha.
"Nuestras ideas no siempre tienen éxito, pero lo que nos diferencia es que no nos rendimos ni nos damos por vencidos", afirma Gibbs. "Simplemente aprendemos de lo que no funcionó, y de lo que sí, y volvemos a empezar". En última instancia, los empresarios son los últimos que quedan en pie.
Piense en cómo ha reaccionado ante los errores y fracasos del pasado. Esto no dicta necesariamente cómo te comportarás en el futuro. Sin embargo, es probable que toda empresa experimente algún tipo de fracaso, y algunos pueden incluso hacerla fracasar. ¿Serás capaz de volver a levantarte y seguir adelante?
2.10. Los emprendedores son adaptables
La adaptabilidad está estrechamente ligada a la resiliencia; tanto la resiliencia como la adaptabilidad son claves para el éxito empresarial en general y del espíritu emprendedor en particular.
Los empresarios deben ser capaces de funcionar sin muchas certezas, sobre todo al principio. Crear una empresa significa enfrentarse a muchos cambios, pero los empresarios pueden adaptar sus planes a las circunstancias cambiantes.
"Los empresarios piensan en positivo y no le dan demasiadas vueltas a los problemas", afirma Jennifer Frye, consultora de marketing. "En lugar de eso, [toman] decisiones acertadas y siempre [están] dispuestos a aceptar el cambio cuando se produce".
Al igual que el optimismo, la adaptabilidad es una forma de pensar. Cuando te enfrentes a retos, hazte las siguientes preguntas:
- ¿Qué partes concretas de tu plan podrían funcionar mejor?
- ¿Quién podría ayudarte a encontrar una forma mejor?
- ¿Qué ha cambiado: el mercado, el medio o tu organización?
- ¿Qué adaptaciones puedes hacer para que tu idea funcione mejor en medio de esos cambios?
2.11. Los empresarios están dispuestos a fracasar
Si quieres sacar adelante tu propio negocio, debes estar dispuesto a fracasar en pequeñas cosas y aprender de esos fracasos para mejorar el negocio. También puede enfrentarse a fracasar por completo y debe tener el valor de pasar a lo siguiente.
"Son personas que asumen riesgos", dice Frye, que se especializa en trabajar con empresarios y propietarios de pequeñas empresas. "Están dispuestos a fracasar rápido y seguir adelante a pesar de la adversidad y los retos".
Puede parecer contraproducente preguntarse si se está dispuesto a fracasar al iniciar una nueva empresa. Pero al final, si no estás dispuesto a correr ese riesgo, quizá debas replantearte tu plan.
3. ¿Se pueden desarrollar nuevos rasgos de personalidad?
Muchos rasgos de la personalidad se consideran innatos, pero una investigación de la Universidad de California en Davis sugiere que podemos ser más flexibles de lo que se pensaba. El informe afirma: "[Ciertos] rasgos son... relativamente estables, pero cambiables con esfuerzo y en el momento oportuno".
¿Cómo se consiguen estos cambios? En primer lugar, debe cree que puede hacerlo y tener una buena razón para ello. "También es importante tener en cuenta los factores motivacionales, ya que el éxito es más probable si las personas están motivadas y creen que el cambio es factible", señala el estudio.
Así que si no naciste persuasivo, optimista, resiliente o creativo, busca formas de cultivar estos rasgos. Examine los hábitos, habilidades y comportamientos de las personas que poseen estas cualidades, y busque libros sobre el desarrollo de estos rasgos.
4. Consejos para desarrollar Rasgos Empresariales
Es estupendo tener rasgos emprendedores de forma natural, pero tanto si eres un emprendedor nato como si no, cualquier aspirante a empresario puede trabajar en ellos. La principal razón por la que la mayoría de los emprendedores crean una empresa es el deseo de ser su propio jefe. Si quieres esta flexibilidad, libertad e independencia en tu carrera, ya has sentado las bases para el éxito empresarial.
El camino hacia el éxito empresarial no está reservado exclusivamente para aquellos que nacen con rasgos emprendedores. Independientemente de tu punto de partida, existe un vasto potencial para desarrollar y fortalecer estas cualidades esenciales. Aquí hay algunas estrategias adicionales para cultivar estos rasgos en tu vida y carrera:
Fomenta la Resiliencia: La resiliencia se forja en la adversidad. Enfrenta los desafíos con una mentalidad de aprendizaje y utiliza cada obstáculo como una oportunidad para crecer y mejorar.
Practica la Inteligencia Emocional: Comprender y gestionar tus propias emociones, así como entender las emociones de los demás, es crucial en el mundo empresarial. Fortalecer tu inteligencia emocional te permitirá construir relaciones sólidas y eficaces.
Invierte en tu Desarrollo Personal: Lee libros sobre emprendimiento, asiste a conferencias, busca mentores y participa en cursos que te ayuden a desarrollar los rasgos emprendedores. La educación y la formación continua son pilares fundamentales para el crecimiento.
Crea un Entorno de Innovación: Fomenta la creatividad y el pensamiento innovador en tu entorno de trabajo. Anima a tu equipo a proponer ideas, incluso las más audaces, y brinda espacio para la experimentación.
Cultiva una Red de Apoyo: Construye relaciones sólidas con otros emprendedores y profesionales del sector. Compartir experiencias y conocimientos te proporcionará valiosos consejos y perspectivas.
Sé Proactivo en la Toma de Decisiones: La indecisión puede paralizar el progreso. Practica tomar decisiones informadas y asumir la responsabilidad de las consecuencias. Esto te ayudará a ganar confianza en tu capacidad para liderar.
Recuerda, cada pequeño paso hacia el desarrollo de estos rasgos te acerca un paso más hacia el éxito como empresario. No subestimes el poder de la persistencia y el esfuerzo continuo en tu viaje emprendedor. ¡El mundo del negocio te espera, lleno de oportunidades para aquellos que están dispuestos a aprender y crecer!
